La argentina que fue: el pato Urribarri, un paso una cagada

SERGIO URRIBARRI:

Misión: aplaudir como una foca

los discursos chabacanos de

su jefa, aplaudir, aplaudir....

... tiene un sueño "entrerriano"... ser el candidato residual del kirchnerismo...

> sueño que para los entrerrianos es una pesadilla <

... por ahora no llega ni al 1% en la intención de votos. No lo busque en este gráfico, porque no existe:

Nacido en 1958 en un pueblo rural de unos 500 habitantes llamado Arroyo Barú, en la provincia de Entre Ríos, del cual fue Intendente gracias a ser conocido como jugador de fútbol, su único "oficio".
Estudios: estudiante frustrado de Ciencias Económicas
Diputado provincial.
Presidente de la CAFESG
Ministro de Gobierno de la provincia con Jorge Busti quien lo irguió como su candidato a gobernador; pensado que podría mantener el poder, ya que este (el pato) solo sería un títere manejado desde el legislativo, ya que era considerado un "che pibe" del tres veces gobernador de la provincia. Obviamente, apenas pudo, el pato que resultó no ser ningún tonto buscó rápidamente su identidad en el kirchnerismo.

Conocido a nivel nacional no solo por ser el acompañante meloso de Cristina Kirchner en numerosos viajes por el mundo y estar siempre bien predispuesto a aplaudir, arrastrarse y chupar sea o no necesario. Como buen obsecuente, quizás tampoco le quedaba otra, ha logrado ser un buen delegado provincial a cargo de la gobernación (electo por amplia mayoría, ud ya sabe que los argentinos y mucho menos los entrerrianos no somos muy buenos en esto de andar eligiendo nuestros representantes). No digo que el pato sea un mal tipo, solo que es un vende humo, uno mas.

Sí a usted le gusta que sus gobernantes le mientan y malgasten los recursos públicos, aquí está su candidato y algunos de sus mejores "logros" (link de notas periodísticas):

UN PATO CON POCAS LUCES

La Cooperativa Eléctrica de Concordia cortó el suministro eléctrico a la residencia particular del gobernador Sergio Urribarri, ubicada en la calle Néstor Garat, por falta de pago.