Breve Interpretación del Marxismo

Breve interpretación a titulo personal de lo que entiendo por Marxismo. No trata de hacer una defensa tajante sobre el capitalismo. 

El capitalismo tuvo su éxito en el simple y sencillo hecho que fue el que mejor interpretó la esencia del hombre. Se expandió libremente por el mundo impulsados por millones de almas, con múltiples motivaciones y necesidades. Las corporaciones capitalistas tienen su esencia en esas características competitivas, de alto ego y ambiciones personales;  que unidas para determinados propósitos se transforman en imponentes sistemas de poder.

El marxismo solo fue un intento fallido impulsado por gigantescos aparatos militares y propagandistas transitando siempre la senda de la violencia y muchas veces en la marginalidad - sometiendo, humillando o eliminando por la fuerza al que no acepta vivir en la rigidez del dogmatismo y por otro lado alienando mediante la devoción y el fanatismos a débiles y sumisos seguidores - aquellos devotos de embusteros y falseadores. En su camino siempre sembró decadencia, corrupción y resentimiento.

Discutir el marxismo hoy, tras haber sumado 150 años de historia de civilización tal cual la conocemos, y más aún intentar ponerlo en practica, simplemente es una ofensa a la inteligencia humana, y un acto extremista.

En las sociedades del presente y fundamentalmente del futuro está la responsabilidad de construir nuevos paradigmas que contemplen a la humanidad toda, sin división de razas, religiones y fronteras. ¿Estas sociedades serán o no mas justas?

- La justicia es una construcción del hombre, y su medida está supeditada a la conciencia y a la superposición de intereses, en la medida que las sociedades sean más organizadas y sofisticadas, podrán impulsar mecanismos que morigeren desequilibrios de fuerza.

Hoy el mundo se encuentra hiperconectado, se han logrado importantes avances en la tecnología y el control de la naturaleza es casi absoluto, hasta que nuevos eventos a nivel de universo planten nuevos desafíos. Quizás las sociedades del futuro comiencen a verse como parte  de un todo, como integrantes de la humanidad, y los desafíos comiencen a estar fuera de la puja hombre contra hombre. La naturaleza del hombre nos ha demostrado a lo largo de la historia, que nada tiene sentido si no existe un horizonte al cual  traspasar o nuevas metas a dónde llegar. 

Marx: Comunismo como la transformación radical de la totalidad de la existencia humana, procurando un hombre libre con una vida armonizada con la condición humana. La suya es la opulencia de la individualidad y de la personalidad en permanente desarrollo, en permanente enriquecimiento. Sus talentos nunca descansan; sus aptitudes nunca se desaprovechan.

Por encima de todo es orgullo; estima su libertad y su autonomía, no ajenas a la comunidad, al pueblo.

Cuando más estrechamente está vinculado con sus semejantes, tanto más le debe a estos y tanto más estos le deben a él.

Nunca podrá estar en paz con un mundo que frustra la vida significativa y valiosa.

En la batalla descubre una felicidad que nunca podría encontrar en la cruel realidad que lo circunda. Nunca atrás, está consagrado al progreso y a una idea.

Cuando Marx escribió estas ideas, quizás lo hizo en un contexto de opresión, con libertades limitadas  y considero que dentro del proletariado habitada un hombre ideal - reprimido - que cuando se sintiera libre se expresaría cuan monje tibetano, pulcro (carente de deseos), disciplinado y  entregado a un ideal. También cabe la posibilidad de que simplemente escribió una NOVELA donde los personajes adoptan características artificiales y ficticias, a la medida de la imaginación del autor, y que por lo tanto no tienen porqué corresponderse con alguna realidad verdadera y científicamente fundada.

-   ¿Quien define qué es lo significativo y valioso?

-   ¿Los decide el individuo?

-   ¿Los líderes revolucionarios y los mesías?

Por otro lado ignora las diferencias individuales del carácter humano, donde la personalidad del individuo asociada al ambiente  lo hacen ubicar en distintas posiciones sociales y cumplir con distintos roles, que fundamentan la división del trabajo y se han constituido en los pilares del hombre moderno adaptado a vivir en sociedad. En esencia, en una comunidad libre, nadie obliga, salvo las circunstancias, al carpintero, al panadero o al médico del lugar, a optar por ese oficio, así como el filósofo y el pordiosero deciden vivir con desapego a las cosas mundanas y materiales. En el hombre ideal de Marx, todos serían filósofos, artistas ó simplemente ociosas personas “emacipadas”.

El concepto de hombre ideal de Marx se convierte en un individuo de élite, al que se le ha extirpado todo tipo de deseos y ambiciones banales. 

PARADOJA 1:
Las ideas de Marx están alejadas de cualquier teoría filosófica y política, por carecer de anclaje en la realidad,  transformándose entonces en un dogmatismo religioso, porque el marxismo veía al hombre ya no a imagen y semejanza de un Dios, sino a imagen y semejanza del Hombre Ideal - construcción ficticia y artificial - de Marx, quien criticaba duramente a  las religiones, con sus escritos dio lugar a un nuevo OPIO de los pueblos, que los mantienen sumisos antes regímenes militares, aglutinados por una promesa libertadora, inerte y falsa. 

Hoy podemos advertir que muchos trabajadores independientes son prisioneros de su oficio, solo obligados por su voluntad y propias motivaciones.

-   ¿Usted se atrevería a decir que sus motivaciones no son valiosas y significativas?

-   ¿Que este hombre no vive en paz y armonía con su realidad?

-   ¿Qué su vida es frustrada?

-   ¿Deberíamos empujarlo a una batalla para lograr inciertos y ficticios ideales?

Marx: Idealismo moral.  Decididamente en contra de la fragmentación y funcionalidad, a causa de la propiedad privada. La funcionalidad ha alienado al hombre.

Marx, al definir al hombre ideal, realiza una simplificación grosera e ignora el verdadero carácter del ser humano, realiza una reducción a un individuo carente de deseos, motivaciones individuales y apegos a vicios. 

Que la humanidad se pueda desarrollar en comunidad, dónde se establecen distintos roles, depende en gran parte de esas particularidad y variabilidad en el carácter de cada individuo, existen personas con espíritus inquietos, algunos más arriesgados, cada uno se adapta a la perfección a distintos roles. División del trabajo determinada por los deseos e inclinaciones, el talento y la individualidad del ser humano.

Cambia el alienamiento a la funcionalidad de la división del trabajo por el alienamiento determinado por una ideología y una estructura “militar” que le dice qué, como y cuando hacer.

En el comunismo no existe la propiedad privada, no es de alguien en particular y de todos en general, por lo que se anula y se pierde todo tipo de derechos a hacer uso cuando uno quiere. En realidad es privada para el pueblo y apropiada por los que mandan, quienes terminan decidiendo de forma más autoritaria y arbitraria sobre sus usos y derechos.

No digo que la gente no pueda tener el ideario marxista, solo le pido coherencia. 
¿Quieres ser marxistas? entonces hazlo en su esencia y con sus ideales - un marxista nunca podría tener ambición por la propiedad privada - eso denotaría una inconsistencia e incoherencia abrumadora con las ideas de Marx. Pero, el común denominador -  que no pertenece a tu selecta clase - querrá ser propietario, porque a ellos no les genera ningún conflicto. ¿Como manejas tu rechazo a esas terrenales criaturas que quieren disfrutar de ciertos lujos y placeres y sentirse propietarios de algo, al menos durante lo que duran sus finitas vidas?. Es muy probable que eso te genere un gran resentimiento. Aquí está una de las peores enfermedades del marxismo, el RESENTIMIENTO.

¿Eres marxista?, entonces desprecias la propiedad privada, y a las corporaciones capitalistas, entonces no utilices twitter, facebook y celulares: autos, lujos y otras excentricidades. Porque todos esos productos son emergentes y distintivos del más puro capitalismo “despiadado según el marxismo” al cual combates, o quieres combatir, con las armas del propio capitalismo.

Marx: Hombre ideal, es un individuo homogéneo y armónico, que nunca está escindido de actividades contradictorias o recíprocamente excluyentes.

El trabajo es exterior al hombre, no le produce ninguna satisfacción y le causa una sensación de hastío y tormento.

Con estas ideas Marx menospreció las bases de desarrollo de la humanidad y de las sociedades, dónde se forjaron de la mano del trabajo y la dedicación, para que él y otros, regordetes burgueses, pudieran sentarse a escribir sus ideas revolucionarias.

En el seno del capitalismo, el hombre moderno movido por su ambición personal, su carácter competitivo y enorme ego ha liberado su potencial creativo, inventivo e innovador a límites insospechados, de lo cual damos crédito en todo momento con el uso de la tecnología, el dominio de la naturaleza y la exploración del universo.

Alguien puede atribuirse, paradójicamente, utilizando los medios de esos logros de la humanidad, que expresan el mas vivo capitalismo, que esta empresa del hombre no ha sido todo lo valioso y significativo que planteaba Marx.

Marx: La humanidad se manifiesta en el trabajo entendida como actividad voluntaria.

Aquí se convierte en una promotora de vagos. Es ignorar la condición humana, sus vicios a la pereza y su apego  a satisfacer emociones banales, que lo llevan a la angustia y a la depresión cuando caen los estímulos.

Marx: Existencia económica y moral del hombre. Esta bifurcación produce inquietud y la sensación de que uno está siendo partido en dos.

Personal ubicado en la esfera dónde se siente él mismo. El artista es el único ejemplo de trabajo creador, es un fin en sí mismo. No deberían existir máquinas.

Auto activo;

¿Relación del hombre con el mundo circundante? Nunca debe ser una relación sumisa, dominados por el mundo de las cosas.

En la práctica los individuos son las víctimas de la alienación general; no controlan sus productos y en cambio los productos lo controlan a ellos.

Para el proletariado, la ley, la moral y la religión son prejuicios burgueses, que ocultan los intereses específicos de las burguesías. (en referencia a la moral burguesa).

Los comunistas no predican la moral, tanto el egoísmo, como el sacrificio individual son formas necesarias del individuo en desarrollo.

Marx realizó una construcción ficticia del hombre, para vivir en una sociedad idealizada, dónde ese hombre ideal estaba coronado de virtudes y mecanismos psicológicos que moldeaban el carácter del hombre real, acosado por un sinnúmero de emociones, vicios y tentaciones a la vida perezosa y super estimulada.

El hombre ideal de Marx nunca existió, y solo vive en armónica contradicción con el hombre capitalista y moderno que todos en esencia somos.

Aquel que diga que no tiene preponderantemente al hombre capitalista dentro de sí, que se despoje de todos los productos que genera la de dependencia del capital, incluido el dinero.  Arroje por los aires su notebook, su Tablet y su Lcd, despréndase de su coche, remate su casa y viva libremente y emancipado la vida que Carl Marx con tanto derroche de tinta deseo para usted, hombre ideal.

PARADOJA 2: criticar al capitalismo y adorar al marxismo en internet, vía twitter, facebook, etc productos del más puro capitalismo.

Los adeptos del marxismo muy lejos de estar a la altura del hombre ideal de Marx – ficticio, elevado y elitista -, terminan construyendo una personalidad frustrada, resentida con los propietarios del capital y prisioneros de vidas angustiadas, mediocres y decadentes.

Desde el punto de vista político, el marxismo, como cualquier otra doctrina totalitaria y fundamentalista de manos de farsante, inescrupulosos y tiranos se ha llevado a la tumba a miles de personas. Otro tanto han sido sometidos, humilladas y despojadas de sus pertenencias.

PARADOJA 3: ideas de libertad y emancipación solo han logrado muertes y sometimiento, tanto de los que las combaten como de los que se doblegan a estas ideas, hoy más que nunca arcaicas y alejadas de la modernidad.

Imagínese usted, el marxismo ya venía con fallas de origen, y con una imposibilidad practica de concretarse en la realidad, por el mero y sencillo hecho que el hombre ideal de Marx no existe, al menos en estado natural, quizás se lo pueda lograr dopado y con altas dosis de estupefacientes.

Entonces, todos los fraudes y pseudos marxismo que le sucedieron solo pueden ser engendros ideológicos puestos a los servicios de supuestas revoluciones. Que como usted y yo sabemos solo han logrado violencia de clases, atropellos a la condición humana e incluso muertes, cuando no se comparte esas ideas. De hecho, si algo plantea claramente el marxismo, es lisa y llanamente la eliminación, por el medio que sea, de las clases sociales hostiles a sus premisas.

Por otro lado, el emergente humano logrado por esas tiranías basadas en el ideario marxista es un individuo sometido a una gigantesca maquinaria militar, comprometida a mantener el régimen. Que lo aliena, lo somete y lo humilla, al extremo de convertirlo en un simple instrumento del régimen. Por otro lado, los “idealistas marxistas”, los que impulsan estos movimientos gozan de lujos, placeres y absoluto poder. Es la aristocracia del nuevo orden de poder, alimentada e impulsada por un gran resentimiento de clases, pero copian y exaltan los mismos vicios de las burguesías oligarcas, a las cuales dicen combatir, cuando en realidad intentan desplazar, para ocupar su lugar.

En el extremo inferior está el pueblo, constituido como masa inerte, compuesto por un tipo de individuo decadente, mediocre y privado de cualquier pensamiento propio, y cualquier libertad individual que usted se imagine. Porque para el régimen así constituido, el hombre ideal de Marx, no es otra cosa que un individuo carente de sueños y deseos  al que solo le cave lo que el régimen le otorga; entonces el pensamiento autónomo deja de ser necesario: porque las ideas las recibe rumiadas por otros, los líderes que conforman la aristocracia.